A partir de una orden de la Cámara de Casación, se dictó un nuevo fallo que prolongó seis meses la condena a Milagro Sala, a 12 años de haber organizado un escrache contra el entonces senador Gerardo Morales.
Milagro Sala fue sentenciada a tres años y seis meses de prisión luego de que de la Cámara de Casación agregó el delito de amenazas a su pena. La dirigente sindical había sido condenada como instigadora de lo sucedido el 16 de octubre de 2009, denunciado por Morales cuando ocupaba el cargo de senador. En ese momento, cuando se encontraba en el Consejo Profesional de Ciencias Económicas de Jujuy junto a Alejandro Nieva, Leandro Despuy, Auditor General de la Nación y al diputado nacional Miguel Ángel Giubergia, sufrió agresiones por parte de integrantes de una red de organizaciones sociales que encabeza Milagro Sala. Morales declaró que ya había sido amenazado por Sala a raíz de sus críticas a la asignación discrecional de licencias de radios FM, organizaciones sociales que respondían al Gobierno.
Se probó judicialmente que el grupo de entre 10 y 20 personas encabezado por Ramón Gustavo Salvatierra y María Graciela López, ingresaron al edificio y destrozaron el lugar agrediendo a las personas que se encontraban dentro, luego de ser avisados por López desde su teléfono celular. Además, amenazaron de forma verbal al entonces senador Morales: “¿A quién vas a venir a controlar vos, hijo de puta? La vas a pagar, venimos en nombre del pueblo, ya te encontramos, esta vez no te escapás, qué mierda hablás de las organizaciones sociales, dejate de joder con los planes sociales, por qué te metés con las organizaciones sociales; hijo de puta, deja de salir en los medios; te vamos a pegar un tiro; la vas a pagar, no hables más de nosotros”, de acuerdo a las pruebas presentadas en la causa penal.
Las amenazas tenían como objetivo acabar con los controles realizados de la mano de Gerardo Morales sobre las organizaciones sociales dirigidas por Milagro Sala.
El nuevo fallo también escarmentó una pena de tres años y seis meses a María Graciela López, acusada de coautora de amenaza coactivas y daño agravado, y otra de dos años y un mes en suspenso a Ramón Salvatierra.